CHIRRI
ON/OFF PALITO
Por N
Con SuMisión al SuperNeem con Amor
No es maldad es simple subsistencia.
No es maldad es simple subsistencia.
El arácnido es trampero por naturaleza.
El tiempo y la evolución le han permitido perfeccionar su estilo y tácticas de vida.
Actúa instintivamente, sin embargo sus técnicas de supervivencia son en extremo
avanzadas, tan es así que no tiene necesidad de salir a buscar alimento, solo llega.
En su limitada mente sólo caben ocho palabras, una por cada extremidad que posee,
para no olvidar ninguna. Sabe que su existencia depende de ello: supervivencia /
coexistencia / observación / reproducción / crecimiento / perfeccionamiento / macramé
/ alimento y consigue todas en forma octagona / simultanea en su tejida conjunción.
Millones de ayeres de cotidianidad / continuidad le han enseñado a repetir / mejorar
cada día lo que le ha funcionado. Sabe que todo estará bien mientras no se salga
de su sitio de confort. Con suma paciencia, desde la esquina más alejada, está en
espera de alguna valiente / insensata alimaña exploradora. Así fue ayer y seguramente
así sería al día siguiente, pero esa cosa no sabe que su jornada no será habitual.
La chiquilla está haciendo
sus quehaceres. Ese molesto e incesante zumbido le incomoda y no la deja continuar.
Ella es inteligente / responsable. Todo lo que sabe lo ha aprendido / imitando a
sus mayores. Se dirige a la cocina y saca de la cómoda un envase con apariencia
ecológica. La esparcida nube toxica con fúnebre olor empieza a invadir el ambiente
lenta / expansivamente; los primeros abatidos son los voladores. De la nada surge
un universo de existencias imperceptibles de todas formas / matices, quienes ante
la inexplicable masacre, intoxicados / espeluznados, intentan dispersarse.
La infanta mira aterrada como
esa pequeña aberración rastrera, la araña, se le aproxima tambaleante. Sus anodinos
ojos se desorbitan amenazando con salirse de sus cuencas. Con la rapidez de un latigazo
la niña reacciona instintiva. Su consciente, inconscientemente activa el mecanismo
de autodefensa a tope, los sensores internos de repulsión / miedo se han activado,
tensando los músculos de su frágil cuerpo, concentrando toda la posible energía
potencial en la pequeña planta del pie. La nena alza su rodilla lo más que puede
y con todas las fuerzas que le permite la suela de su zapato, aplasta a ese horripilante
/ amenazante ser. Finiquitada la acción continua con sus cotidianas labores, con
la gratificante sensación de haber eliminado una plaga más. La angelical criatura
está feliz, ninguna nube empaña su porvenir, al menos hoy.
La especie Jarritus del Planeta Tlaquepaquia, son pioneros en los viajes
interestelares, lo lograron acortando las distancias espaciales de años-luz a días.
Por ahora visitan a todos los mundos poblados que integran la vía Láctea en son
de paz. Son seres de gran plasticidad / deformidad lo que los hace horrendos / indestructibles.
Su consistencia es granosa / grasosa / mucosa y de composición molecular trinitrotolueno
/ nitroglicerosa.
Su sorprendente desarrollo tecnológico se basó en que desde el principio de su evolución,
al darse cuenta de su conciencia, en lugar de luchar por imponer un sistema numérico
u otro, apostaron toda su inteligencia al sistema binario, incluso sus estados anímico
/ emocionales. Generalmente son seres muy amables de índole pacifica; no desean
hacer daño o ir conquistando planetas así por qué sí, pero son de mecha corta y ante la mínima provocación, ya sea por una
mirada esquiva, provocada por miedo / asco o cualquier señal de desprecio / repugnancia
o crítica a su aspecto / forma de pensar y estallan en violenta ira. Su bipolaridad
mental pacífico / iracunda ha provocado que la mitad de los planetas visitados haya
terminado conquistado / dominado en calidad de esclavos / mano de obra / alimento
gratuito y la otra mitad, los afables, como colegas / socios, amigos / hermanos
de especie en busca del conocimiento / conquista de otras galaxias.
Deslizándose a la velocidad
de la oscuridad (chingamadral de veces
más rápida que la velocidad de la luz)
y dirigiéndose al acuoso tercer asteroide del Sistema Solar Ni8/4 del Brazo Espiral
de Orión; dos cosmo / astro / monstruonautas dialogan dentro de la nave espacial de avanzada manufactura.
-
¿Cómo crees que nos reciban mañana los terrícolas Yomy-Yomy?
Con cierta confianza / credulidad
/ optimismo:
- Ojalá no sean prejuiciosos y que sus paradigmas sobre la tolerancia
estén bien cimentados Yelo-Yelo.
-
Pase lo que pase, mañana será un día memorable- dice el alienigena con gran actitud.
Frente a uno de sus múltiples
hambrientos / gruñientes estómagos, mientras simultáneamente dibuja en el aire la
trayectoria / recorrido de una cinta de Möbius, que es el símbolo universal del saludo / abundancia / alimento / infinito / reciprocidad, dice: Seguro que
sí Yomy-Yomy, Seguro que sí.
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