sábado, 20 de octubre de 2012

Ósculo oscuro

OSCULO OSCURO
x Stv

SI: ¿crees? eres res o ¿sabes.?
Que por la boca muere el pez,
La chiva por ídem al cuadrado,
El Mono por saber demasiado,
El zenzontle por su mega canto,
¿Por qué o quién mató al gato?

>La colisión es inminente e inevitable, figuratívamente hablando. Dos mundos completamente opuestos, cara a cara, viajado a estrepitosas y peligrosas velocidades. En el peor de los sentidos, el panorama del desenlace será exquisitamente fatal. Una franca bienvenida al frenético apocalipsis con tintes de éxtasis les espera a ambos seres y aún ninguno lo sabe. Por un lado, tal cual electrón, cargado con una pasmosa negatividad rayando en franca maldad y de frente, su contra parte correspondiente, la atractiva protona con su prominente positivismo eléctricamente muy atrayente. Siendo entes tan asimiles, la total empatia es a la enésima potencia.

>Cuando se habla en términos infinitesimalmente exponenciales, hay que considerar desde los miles de millones como unidad elemental hasta los fundamentales eones de números e incluso muchísimo más allá. De esas dimensiones estratosféricas se debe tomar como referente en el terrible / deseable encontronazo fenomenal, Aunque se diga lo contrario después del excelso evento ya no se vive, al menos no igual. Cuando se presenta y se presencia, el colosal espectáculo es fenomenal en toda la expresión y extinción de la palabra, que se trasforma en salpicante y (b)(v)ocalizante acción.

>Ése acuoso vehículo viajante está compuesto por más de cuatrocientas especies diferentes de valientes ménsis moustrosidades. La mente de cada ente de ése gigantesco ejército descerebrado, sólo sabe o intuye que va tras la inmortalidad, la más grande presa / gloria que se le puede otorgar a un guerrero (del tamaño o dimensión que éste fuere). De ese pequeño gran salto dependerá la perpetuidad de su gen, de su origen, de su especie en si. No saben porqué actúan así, pero su bárbaro instinto les dicta cual debe ser su primitiva / avanzada conducta para trascender, para procrear a como de lugar. Ese diminuto pensamiento multiplicado por un millón o un eón. De ese tamaño o dimensión es el deseo de conquista y ansia de penetrante invasión.

>Millones de seres patógenos (para ser exactos y tomando con cautela las dimensiones precisas, aproximadamente la misma cantidad de seres vivos que existen en cualquier otro habitad de cualquier otro sistema molecular, solar/estelar o galaxideral) en busca de la eternidad. Son voraces e insaciables, armados hasta los dientes con las más temibles, placenteras y vivíferas intenciones. Y cual kamikazes hipersuicidas, se lanzan en ensalivada manada al espacioso y vicioso vacío. Consientes, sus inconciencias supondrán que entrarán en esa desconocida y carnosa cavidad superior, que enfrentarán feroces batallas con sus símiles nemesis biunívocos; saben que la mayoría morirán, aún así se lanzan gozosos y dichosos. Ellas igual que ellos, de entrada, intentarán neutralizarlos y al final así será, ambos bandos por igual.

>La fase bacterio-invasiva concluyó, la etapa bio-química ha iniciado. El íntercambio salvaje de torrenciales fluidos salivales ha entrado en un contacto ligue lingual. El deseo por eliminar al intruso es natural de entrada. La neutralización por ambos bandos es inmisericorde. Sólo habrá una segura ganadora en esa lucha sin tregua y sin fín o sea mejor dicho con fin y efectivamente eso será, su fin y a la vez su supervivencia literal, quien será la gran vencedora; el perdedor también lo disfrutará. Será una súper, dúper, rete-contra y archi-mega experiencia, corrección, vivencia.

>Las sustancias empiezan a reaccionar en cadena, cual dominó, pero en caudalosas cascadas simultáneas de adrenalina, sustancia a tope aún antes del encuentro fatal, que pronto se transformará en vital. Dentro del colosal y candoroso cuerpo circulan internamente, en  conjuntiva y complicada complicidad, toda clase de sustancias y elementos, mismos que se han sintetizado en gloriosas serotoninas y éstas a su vez por la mezcla del oxígeno puro de esa profusa y acojedora caverna mutando a la inflamable oxitosina. La ya ardiente sangre, se ha oxigenado inmoral e indebidamente más de lo debido. La chispa se ha encendido.

>Enérgicamente, todas las alarmas, señales de emergencia y alertas se han activado. Las temperaturas corpóreas han aumentado a niveles letalmente peligrosos. Las puertas de la seudónima muerte chiquita han sido abrumadóramente semiabiertas. Las defensas, colapsosas y gozosas  están a punto de autoceder ante el encantador intruso invasor, La visibilidad es toda caótica, de oscuridad plena y satisfactoria, múltiples veces salpicado por brillantes descargas chispeantes de colorida energía, que presentándose y extiendiéndose como de rayo por todas las terminales nerviosas en toda esa mole, en formas simultáneas generan pecaminosas sensaciones tanto visuales como vibratorias. La experiencia es deliciosa e indescriptiblemente incomparable.

>La combinación de sustancias químicas y etéreas energías cósmicas han generado, o más bien, en la peor de sus acepciones, degenerado desorbitadas explosiones, que han logrando liberar las tan ocultas, preciadas y aún más deseadas de las sustancias, las endorfinas. Las torrentes cantidades de energía generada han provocado un caos en el sistema. Todos los catalizadores han entrado en acción. Las enzimas y hormonas expelen químicamente el antídoto para que retorne de las arítmicas y taquicardiacas ciento cincuenta pulsaciones por minuto, que casi provocan el colapso del mecanismo autoregulador de bombeo, intentando retornar a su estable estándar de setenta.

>La siguiente fase ha comenzado, pero intentar hablar de ésas incuestionables menesteres hormonales de cualquier suculento y tormentoso ser, sea del habitad o universo que sea, es como querer comprender el m(o)(e)nstruil comportamiento consecuente a la mensual mecánica lunar femenil. Explicar esos neuroquímicosensosensibles  y lunáticos fenómenos, equivale a lanzarse al vacuo infinito con todo y paracaídas, a sabiendas que dicho instrumento es inútil en ese espacioso éter. Sí acaso, sí se viajara acompañado, en su lugar, mejor un condón. Y parémonos ahí, no nos pase lo que al minino superior que por bocón le dieron chicharrón, así que chitón. ¿O; no?-dijo con voz, mirada y literalmente todo analítico él, el cacofónico anonimalévolo; Don: N:o.

miércoles, 17 de octubre de 2012

ID: PRECIOS@

ID: PRECIOS@
x Stv
«¿Soy yo o no?, he ahi el dilema»

Encontrábame deglutiendo tubérculo pueblense cuando de bote pronto y sin esperarlo, me encontré de frente con un conjunto de grafías inefables. De nuevo, por curiosidad, me vi obligado a enfocar mecánica y ópticamente el objetivo en cuestión, lleno (al principio, cómo siempre) de caracteres indescifrables. Acepto que los problemas que me acogen siempre serán mayores a cualquier texto o pretexto, aun así intento concentrar mi atención al imponer y poner mi mente en blanco o cuando menos en el limbo. Mi feroz mirada furtiva empieza a recorrer cada una de las líneas. Escudriño cada palabra lenta e íntegramente, sé de antemano, que encontraré un sin fin de inconsistencias y deslices gramaticales; las ideas o los conceptos son lo de menos. Escrupulósamente disecciono cada párrafo. Quiero ver al verdadero protagonista escrito dentro de cada renglón; creo que descubriré, incluso, sus más oscuros y siniestros pensamientos, sus miedos o terroríficas fobias, pero mi inocente instinto me dice que en ésta ocasión no será igual.

Mi historia podría ser la tuya, la de él, la de una o un cualquiera o ningun@, incluso, quizás, la de ell@s; al final, aunque siempre lo nieguen, todas las patrañas son iguales, excepto ésta que es real, porque está basado en contundentes hechos verídicos y científicamente comprobados, pues se trata de ti. Desde hace mucho tiempo obsesivo investigo / observo / escribo sobre tú persona y  seguramente ni cuenta te habías dado. Dirás que no te conozco, que no sé nada de ti. Sé lo suficiente. Estás pensando: ¿Qué es ésto: Una broma pesada, una mala jugada de algún escritor demente quien desea penetrarse en lo más recóndito de mi ser? -me cuestiono, nuevamente- ¿Seré tan transparente? ¿Me delatará mi forma de hablar, lo que digo o cómo lo digo o la forma en que garrapateo las cosas? ¿Qué podría ser?

Idiota / indiorante, pues ¿qué se cree? Cómo si de verdad pudiese conocerme. No tiene ni la menor idea de quién soy, mucho menos lo que pienso o de las cosas que me ha tocado vivir. ¿Qué podría saber éste desgraciado de mi? ¿Tendrá el poder de leer la mente? NO, que absurdo. Estoy entrando en una demencial paranoia. No hay forma de que él sepa lo que pienso. Mejor dicho, para empezar: ¿sabrá lo que piensa él?, ¿pensará?. Tengo la idea de que nada más escribe por escribir, un instinto salvaje de decir por decir, sin poder decir nada. Él no puede saber más de mi que lo que yo sé de mi mism@, que es.., que es… Ironías, parece que no sé mucho de mi.

Del documento atiborrado de signos inescrutables, que intentaban hablar sobre lo paradójico de mi identidad,  que ni al final o al principio me dijeron nada o mucho menos algo, me encuentro en éste preciso punto, que en realidad es coma, donde leo y releo otra vez y no encuentro sentido alguno a las palabras aquí plasmadas. Sigo adelante en automático, nada más para que los demás, que igual me están estudiando y viendo leer éste texto, no juzguen mi falta de atenta y adiestrada atención. Desconecto mi cerebro y pienso en otras cosas mucho más agradables, mucho más provechosas que yo mism@. Porque a mi, nadie me va a cuestionar, mucho menos intentar concentrarse en mi ser. Él, ni nadie puede saber nada de mí porque ni yo mism@ se quien soy.

Confundid@, aturdid@ y cansad@, dejo la lectura. Nada entendí / aprendí. Sólo pude recordar, casi al final (entre párrafos y puntos, la siguiente línea / frase  indescifrable que estaba escrita ahí / aquí:

Quieras o no, TÚ eres e/l/a hero/ína/e de ésta película, ¡A/p/m/á!

-¡BAH! aquí todo suena a prejuiciosas, precipitadas visiones y conjeturadas moralinas o dichos ilógicos, para empezar por que yo ni siquiera se leer, mucho menos entre líneas.  Es más ya ni  me encuentro aquí, ya me fui (me llevaron y chamaquearon) desde hace rato y ahí está e/l/a de a lado, que le consta, o ¿no, vale?